nuestra misión
Toda persona que ha aceptado a Nuestros Señor Jesucristo en su corazón, y es bautizado, viene a ser parte de la Iglesia de Cristo, y debe desempeñar un ministerio muy importante: representar a Cristo en todos los ámbitos de su vida. No dependen del sacramento de la Ordenación, sino del sacramento del Bautismo. El ministerio bautismal es:
- Continuar en la enseñanza y comunión de los Apóstoles, en la fracción del pan y en las oraciones.
- Preservar en resistir al mal, y cuando caiga en pecado arrepentirse y volverse al Señor.
- Proclamar las buenas nuevas de Dios en Cristo y traerlos hacia El.
- Buscar y servir a Cristo en todas las personas, amando a su prójimo como así mismo.
- Luchar por la justicia y respetar la dignidad de todo ser humano.
Esto quiere decir que cada miembro de la Iglesia es, por su bautismo, un ministro.
Los miembros de la Iglesia de la Santa Natividad somos cristianos católicos y evangélicos que creemos en la Santísima Trinidad, Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, a quien servimos fielmente, para traer más personas hacia Dios, donde juntos a través de la adoración, el estudio, la convivencia de hermandad, viviendo y predicando su santa palabra, somos una comunidad de Cristo y para Cristo.